Envases eco-friendly, reutilizables, personalizados, funcionales, creativos e interactivos son las principales tendencias en packaging que están marcando este año 2017, según señala LeBranders en un artículo de su página web. A esto se suma la actual preferencia por el diseño new-vintage, mencionada por la Asociación Española de Empresas de Branding (AEBRAND).
Además, la impresión digital sigue ganando terreno en el segmento del mercado de producción de diseño de envases. El informe de mercado The Future of Package Printing to 2019, realizado por Smithers Pira, recoge las previsiones de un crecimiento anual del 17 por ciento en la impresión digital de envases hasta 2019 y se estima que llegará a alcanzar una facturación de 13.500 millones de euros en esa fecha.
La importancia del diseño y la creatividad en packaging
Gracias a la impresión digital, que realiza tiradas cortas, es posible ofrecer los trabajos con alto grado de personalización y creatividad que demandan las marcas.
La tecnología digital permite imprimir mayor variedad de diseños únicos y crear packaging personalizado que se adapte a las necesidades de cada cliente. La suma de la personalización y la aplicación de acabados al envase tiene como resultado el packaging premium, un producto de valor añadido que presenta una alta calidad. Acabados como el estampado digital, el barniz 3D, el troquelado láser Ultra HD y tintas especiales (tinta rosa fluorescente y tinta blanca), pueden marcar la diferencia entre un modelo de packaging y otro.
Como ya sabemos, la presentación del producto es un factor determinante que influye en la decisión de compra. Desde el lineal, el packaging debe cumplir la función de captar la atención de los consumidores y transmitir a los clientes el mensaje previamente definido por la empresa, de ahí la importancia del diseño del envase.
Más allá de su función básica de proteger el producto, el diseño del envase puede hacerse pensando en cubrir otras funcionalidades, con el fin de aportarle una utilidad extra al packaging.
La creatividad es un aspecto fundamental en el diseño del packaging que hay que intentar potenciar al máximo para lograr sorprender al cliente ofreciéndole algo diferente que le ayude a decantarse por un producto determinado.
Según las tendencias citadas por LeBranders, en la actualidad, los diseñadores realizan, a veces, un juego visual a través de la creación de un envase trampatojo, es decir, aquel packaging que, por su apariencia, simula ser un objeto pero realmente es otro. Además, este año ha adquirido protagonismo el packaging interactivo, con diseños que pretenden despertar emociones y crear experiencias que hagan que el cliente interactúe con el envase.
El packaging vintage es otra de las tendencias actuales, tal y como señala la Asociación Española de Empresas de Branding (AEBRAND) en un artículo de su web. El estilo vintage está de moda, incluso en este sector, a lo que se suma el gusto por lo artesanal.
En algunos casos, marcas como el jabón Magno, el gel Moussel y la levadura en polvo Royal han sido fieles a su diseño inicial y han mantenido en el tiempo el mismo grafismo, volumen y tipografía original. En otros casos, el diseño del envase ha evolucionado levemente y solo se ha introducido un toque actual, y en ocasiones, destaca el diseño new-vintage, cuando se da un nuevo tratamiento gráfico a códigos visuales del pasado.
Packaging sostenible
Tanto las empresas del sector de los envases y embalajes como sus clientes consideran importante usar packaging sostenible, tal y como lo avalan diferentes estudios.
El estudio The importance of sustainability in packaging, que Pro Carton encargó a Smithers Pira, señala que el 96 por ciento de los propietarios de marcas y minoristas de los cinco mercados europeos clave del packaging, entre los que se encuentra España (además de Alemania, Reino Unido, Francia e Italia), perciben que es importante para su negocio utilizar envases y embalajes sostenibles, e incluso más de la mitad de ellos (52%) lo tildan de “muy importante” o “crítico”.
Además, este mismo estudio indica que “los encuestados esperaban que la expansión del comercio minorista multicanal impulsara el crecimiento más fuerte de los envases de cartón plegables durante los próximos cinco años”. Este tipo de packaging, también conocido por su término inglés folding carton, es “percibido como la forma más versátil y sostenible de envase y embalaje primario para canales de distribución más complejos”. Un ejemplo de material sostenible es Tecknocard, una cartulina gráfica con una cara estucada que se fabrica a partir de fibras 100% recicladas.
Además de considerarse más sostenible que otros materiales existentes en el mercado, los envases de cartón plegable se caracterizan también por su versatilidad, ya que están disponibles en diferentes formatos y tipos de papeles como Metalprint, Incada Exel – folding estucado con reverso madera -, Invercote Albato, Kraft y Folding Simwhite.
